Este miércoles 17 de febrero, Miércoles de Ceniza, podremos reiniciar la celebracions públicas en nuestra parroquia.
Al mismo tiempo que agradecemos a Dios el regalo de poder reunirnos como su familia para orar y adorarlo, también aceptamos con responsabilidad esta oportunidad para seguir cuidando unos de otros.
Que el Señor nos fortalezca y nos conceda su paz en estos tiempos difíciles, compartiendo su gracia con todos los que más lo necesiten.