Escuchar es un arte. Al igual que otros hábitos buenos, la escucha activa requiere tiempo, práctica y voluntad. Escuchar a Dios implica no sólo el uso de la mente: hace falta también el corazón y nos lleva a la obediencia auténtica, produciendo muchos frutos buenos en nuestra vida. El padre Pablo nos guiará a crecer en el arte de la escucha: a Dios, a la iglesia, a los demás y a uno mismo. Esta actividad será el domingo 10 de noviembre de 2 a 5pm. en el salón parroquial.